Cada tanto nos replanteamos el tema de la dieta, sobre todo cuando esta llegando el veranito, o cuando tenemos algún acontecimiento especial (llámese casamiento donde va nuestro ex y queremos estar esplendidas, o alguna fiesta para la cual queremos ponernos justamente “ese” vestidito que no nos prende por un par de centímetros…en el mejor de los casos).
En fin, dietas y mas dietas, siempre a la vista de uno. Pero hoy no es exactamente de ese tipo de dietas de las que me gustaría hablarles, es algo un poquitín mas, complejo no es la palabra, pero mas enroscado seguro que si.
Creo que hay momentos donde el empacho de hombres es tal, que necesitamos tomar medidas drásticas. Ey ey ey! Que esto no supone que tengamos tantos que ya estemos cansadas de ellos, no no (vieron que les dije que el tema era enroscado), esto significa que es tal el mambo que muchos tienen en sus bellas cabecitas que comienzan a colmarnos la paciencia.
Encima de todo, no tienen piedad porque aparecen como si fuera un bombardeo, todos los complicados nos tocan encadenadamente, salimos de uno y nos topamos con otro…muchos dirán que tenemos un imán o que nosotras los elegimos así, pero NO! Es una suerte de maldición que nos acecha. (¿?)
En fin, ante todo empacho es necesario proceder a una desintoxicación. Si chicas, no me protesten, una vez que hacemos esto quedamos liberadas y podemos volver a empacharnos (pero esta ves espero que sea de tantos y tan buenos…y no de tantos y tan complicados).
La cosa es muy simple, abstinencia total de bomboncitos, budinazos (como dice mi señora madre) y de comernos algún carocito…si si si amigas mías es vital que hagamos AYUNO DE HOMBRES.
Es una etapa en la cual sentiremos como una sensación de falta de…problemas ajenos, enrosques por cualquier cosa, malestares varios, ex que andan dando vuelta, entre ortos síntomas…pero la cuestión aquí es que hay que resistir, hay que aguantar, debemos ser fuertes!
También extrañaremos una suerte de indecisión permanente por parte de los hombres, ya sea por comprometerse o no, por encarar una nueva relación o no, por no saber si nos quieren o no, en fin, una abanico de posibilidades tan amplio que mejor no sigo porque estaríamos un par de….siglos.
Si logramos superar estas sensaciones que nos acechan, vamos por buen camino, significa que estamos desintoxicándonos.
Pero como todo proceso, conlleva un sacrificio, y es el de mantener alejada esa fruta prohibida por un periodo de tiempo considerable, pensemos que ayuno no pude hacerse por mucho tiempo sino moriríamos de inanición, por lo tanto es un periodo de tiempo reducido. Ven que no hay de que quejarse…y esto va para ambos sexos.
Porque seamos sinceras, aunque tengan mil mambos encima, nos gusta tener a alguno cerquita…pero chicos!!! no se la crean ni abusen porque no nos costara mucho pasar de ayuno, a un gran periodo de dieta con reducción de vuestra presencia en gran parte de nuestra vida…
Como verán no es algo tan difícil, es simplemente alejar ese “fruto” prohibido durante un tiempo, para recuperar fuerzas, y porque no paciencia, para encarar una nueva historia.
Ahora si tengo que dejarlos porque me voy a beber un vaso de agua, estoy en pleno proceso de AYUNO DE HOMBRES.
