27 de febrero de 2008

Sexto sentido femenino: De vacaciones!

Muchas veces se dice que las mujeres tenemos un sexto sentido…y otras tantas yo me pregunto para que, o mejor dicho DONDE ESTA???.... No se me enojen las amigas y no salten en una pata los hombres, que esto no significa que nos vaya a dar muy duro, simplemente reflexionare (si puede llamarse así) sobre algo que veo muy a menudo. Muchos explican ese “sexto sentido femenino” como una especie de sensación, de percepción, de lograr ver mas allá, de una intuición o de corazonadas…no se que será exactamente, solo se que en muchas ocasiones no existe o simplemente se fue de vacaciones. Que nos pasa chicas que mas de una vez la percepción del hombre que tenemos al lado es diametralmente opuesta con la que verdaderamente es. Será el amor que nos nubla la visión, los oídos?, no lo se con certeza, pero si esta clarísimo que dos de nuestros sentidos. Que significa esto? Que nuestro sexto sentido no nos esta funcionando muy bien o directamente no existe. Y en esos casos donde la percepción que tenemos de la “onda” que nos tira algún ejemplar (también del sexo opuesto), no es exactamente la que el nos esta tirando. Enseguida ponemos quinta y ya estamos casadas, con hijos (también nos hacemos una idea del sexo de cada uno)….y si chicas, reconozcámoslo, hasta nietos nos imaginamos, y sus respectivos nombres. No se si es la ansiedad o que, pero siempre vamos como un millón de años luz delante de ellos, sin siquiera saber si el nos mira con ojos de algo mas que amistad. Donde queda entonces el sexto sentido ese? Esta vez esta de excursión. Donde esta ese sexto sentido, cuando el individuo que tenemos enfrente nos esta “chamullando” y nosotros no nos enteramos. Seguramente todos los que nos rodean se estén dando cuenta (será que ellos/as tienen ese sexto sentido que a nosotros nos falta?). Seamos realistas, puede ser que algunas tengan (como verán no me incluyo, porque mi sexto sentido se de buena fuente que no existe, nunca existió y no existirá jamás de los jamases) cierta facilidad para poder ver mas allá, mas objetivamente diría yo, la situación en la cual estamos inmersas, pero cuando entran en juego sentimientos, ganas de estar con alguien, pues todo eso se va muy de paseo. Y la verdad no me gusta nada que nos ocurra esto, que podemos hacer al respecto?, pues no tengo ni idea. Si lo supiera les aseguro que me gustaría compartirlo con ustedes. Simplemente la receta que podemos tomar es la de “hacerles creer que ese sexto sentido existe, que somos muy perspicaces, que leemos entre líneas, que sabemos cuando nos mienten y cuando no…en fin hacerles el verso (diríamos nada muy lejano a lo que mas de uno hace).

3 de febrero de 2008

Guapísimas con o sin ayuda:

Qué cantidad de cosas que usamos las mujeres para ponernos más lindas, se lo han preguntado alguna vez? Y no, no me equivoque dije “mas”, porque debo afirmarles que ya somos TODAS lindas por naturaleza femenina.
Comencemos con las miles de cremas que existen en el mercado, desde aquellas que están destinadas a eliminar las estrías, la celulitis, los kilos de más, pasando por las que tienen como objetivo reafirmar nuestra silueta, hasta llegar a las “mágicas” eliminadoras de arrugas (y aquí existe todo un arsenal orientadas a cada parte de nuestro cuerpo que pueda sea susceptible de arrugarse). Y por supuesto no debemos olvidarnos de aquellas utilizadas simplemente como hidratantes, que hay un centenar, dependiendo de la piel, de la parte del cuerpo en la que se emplee y mucho mas.
También existe todo un gran paquete de maquillajes, aquí tenemos todo un mundo, corrector de ojeras, sombras de ojos, iluminadores, bases, colorete, lápiz labial, delineador, y algunos más que no conozco. Pero esto no es el fin, ya que además de existir millones de marcas, existen aquellos que son hipoalergénicos, cremosos, naturales, e insisto una gran variedad que escapa a mis conocimientos y bolsillo.
Por otro lado están las fajas reductoras, o que “moldean” el cuerpo. Aquí debo hacer una pequeña acotación, en las publicidades las chicas con todo un arsenal de rollos que se desparraman impunemente por la maldita zona de la cintura, se las calzan (como si fuera fácil ponérselas) y aparecen esplendidas. Automáticamente pensamos, no se nota y podemos ponernos ese vestidito tan lindo que usábamos cuando teníamos 15 años más o menos (eh! La moda se recicla, no es que mantenga una gran añoranza por volverme a poner aquella ropa que usaba cuando era joven y esbelta), pero chicas si justo el día que la usamos, un flamante caballero (en el supuesto caso de que exista) se nos cruza en el camino. Pues aquí existen varios escenarios posibles, algunos de los cuales son:
* Que nos vayamos con el y que tardemos aproximadamente 40 minutos en el baño para sacárnosla y que al vernos el ponga cara de sorprendido ante las dimensiones totalmente diferentes de nuestra cintura.
* O bien que nos ayude a quitarla (seguramente serán menos de 40 minutos) pero la magia diríamos que se esfuma y la cara de espanto será la misma que en el caso anterior.
* Que no ocurra nada esa noche, pero que al día siguiente tengamos una cita con el y hagan unos 30 grados a la sombra y nosotras estemos totalmente fajadas y deshidratadas.
Existen unos corpiños, sujetadores, brasiers o como mas les guste nombrarlos, que nos permiten lograr cierta metamorfosis en nuestro busto, como: aumentarlo, reducirlo, levantarlo, juntarlo, y seguramente alguna otra cuestión mas; que tienen un repercutir en el sexo opuesto similar al caso anterior, aunque creo que si la meta es reducir, la sorpresa que se llevaran seguramente será grata.
Adosado a esto, están las “calzas de silicona levanta glúteos” si si si, así se llaman (tuve que investigar, no porque tenga un pandeiro glamoroso y no las necesite, sino porque iba a escribir simplemente bombachas con glúteos y no era muy refinado y sofisticado).
El tema del cabello es un tema complejo, por eso me limitare a decirles que hay infinidad de productos para hacerlo más lacio, más grueso, más fino, con forma, sin forma, para mantener el color, las famosas extensiones, los geles para marcar los rulos, la planchita, las tinturas. Realmente es un mundo que difícilmente pueda resumírselos aquí, pero para muestra vale lo que les he comentado.
Ni hablemos de los tacos para parecer más altas o los zapatos bajos cuando queremos parecer más bajitas (muchas veces causado por un fulano que tenemos a nuestro lado y que posee un par de centímetros menos que nosotras). A esto podemos sumarle la gran cantidad de vestimenta que complementa nuestra silueta para hacerla parecer más delgada, menos delgada, mas alta, menos delgada, o lo que queramos (porque lo hay, no se como lo hacen pero hay para todas).
Seguramente y como siempre digo habrá muchas cosas que me estoy olvidando, pero con esto creo que tenemos para darnos una vaga idea de las cosas que el mercado nos ofrece para vernos mejor. Y todo esto sin entrar en los afamados y muy de moda temas de la cirugía estética. Pero lo que quisiera que de esto nos quede, es que todo vale, siempre y cuando lo hagamos para nosotras, para mirarnos al espejo y vernos mucho mas GUAPAS.
Y ahora los dejo que tengo que ir a comprarme una crema que reafirma los brazos…